En esta noche me encuentro algo confundido, la pereza en forma abstracta ataca mi ser,
me ha contado un secreto del que tanto quiero y espero. Si no fuera por que son sólo ilusiones
de intenciones fallidas en mi, creería que solo estas en tu tablero de ajedrez de ego viril, viajando
y desvariando, creando notas agradables para calmar el dolor.
Recordando lo abrumador que se tornan estas lluvias de poesía rota; poesía manchada de
tintes negros y grises lágrimas, pisoteadas por la incertidumbre. Algún día, sin necesidad de contar
3 te sorprenderas de mi distancia mezclada con piscas de indiferencia y una cucharada de sarcasmo.
Y aquí estoy, bebiendo el místico brebaje, cultivo de la tierra. Absorbo su aroma y me deleito
como un asesino embriagado con el olor de su victima en fase pudrición fresca, ¡Oh! mi droga mi
maravillosa cafeína, estás conmigo en mis deleites de libre pensamiento, cuando sonrío y cuando lloro, haciendo tu sabor aún más amargo. Pues ahí me tienes, delirando como un jovencito.
No te olvides nunca, atolondrado ruiseñor ...
que te quiero y me cuesta menos adorar y extrañar tu mentalidad
que dejar y hacer un lado mi ira, que lo único que espera, es la señal para dejar
caer esos truenos que están meciendo mi alma en este instante.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario